A los costados de su carretilla coloca la jalea de sabores como menta, chocolate, tamarindo y rosa; en pequeños orificios guarda los vasos y una funda sostiene los sorbetes.

Galito, como lo conocen sus amigos y familiares, tiene 78 años y desde hace diez se dedica a vender prensados, canguil y bizcochuelos en cada baile popular que realizan en Rocafuerte.

Otros oficios. En sus años “mozos” Tantana se dedicaba a la agricultura dentro de su comunidad, pero ya hace más de una década quiso emprender un negocio independiente. Su actual trabajo le sirve para vivir tranquilo y mantener a su familia. 

“Ya he perdido la cuenta en cuántos bailes y fiestas he trabajado”, agrega Tantana mientras raspa la gran placa de hielo para extraer el granizo que produce un cubo metálico.

Indica que al principio de su trabajo sus manos se ponían gélidas al manipular el hielo, “ahora ya no me hace nada el frío, hago mis prensados sin ningún problema”, cuenta con seguridad. 

“Para vender, a todo le pongo empeño y dedicación”, explica. Añade que el éxito de su trabajo es el buen trato hacia el cliente. 

El valor de cada prensado tiene es de 50 centavos.