La presencia de más de 20 gendarmes alarmó a los moradores de ambos sectores.
El reporte de la Policía indica que los uniformados buscaban algo específico: desmantelar una presunta red de trata de personas, que supuestamente reclutaba menores de edad con fines sexuales.
La acción policial tuvo lugar la noche del miércoles, aproximadamente a las 22h00.
Dos casas fueron allanadas, informó la institución del orden.
El operativo permitió la captura de Santiago C., de 36 años, y Edward M., de 34, a quienes se acusa de cometer el delito de trata de personas, que está estipulado en el artículo 91 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), explicó la Policía.
Entre las evidencias encontradas, según la entidad policial, están un CPU, celulares, 3.500 dólares en efectivo, un disco duro, una agenda con nombres completos de las menores y citas agendadas entre las víctimas y otras personas, programas de edición, fotografías sugerentes de las víctimas y material pornográfico, informó la institución del orden.
Juan Carlos Iza, jefe del Comando provincial, indicó que la Dirección Nacional de Policía Especializada en Niños y Adolescentes, Dinapen, venía investigando hace varias semanas la desaparición de menores de edad que abandonaban sus hogares.
“Este tipo de abandono no obedecía a los patrones comunes de desapariciones de chicas, que por problemas en sus casas se iban y permanecían en domicilios de otros compañeros o familiares”, contó Iza.
De acuerdo con las investigaciones, las víctimas se alejaban de sus hogares durante los fines de semana y luego de tres días aparecían en casas de amigas o compañeras de clases, pero no daban nombres, explicó el oficial.
“Se logró dar con el paradero de una persona que aparentemente era la que captaba a las desaparecidas. Una madre de familia, a través de la confianza que logró retomar de su hija, obtuvo información y dio cuenta de la existencia de una organización de trata de personas”, dijo Iza.
Según narró, la noche del miércoles y minutos antes del operativo, una agente encubierta acompañó a una menor al lugar donde se las citaba y entonces se conocieron más detalles del modus operandi de la organización.
“Estamos ante un caso de trata de personas, en poder de los dos aprehendidos se encontró gran cantidad de material pornográfico fuerte y dinero en efectivo”, señaló.
El oficial explicó que los hoy detenidos utilizaban las fotos de las menores para entregarlas a los clientes y que ellos escogieran.
A las víctimas, según la Policía, se las llamaba para una entrevista previa en la que debían mostrarse interesadas en querer ser parte de la actividad ilegal.
Luego de eso, se informó, tenían que asistir a una sesión fotográfica y esas imágenes eran enviadas a las personas que requerían los servicios de las menores.
“Las adolescentes eran contactadas y enganchadas por otras chicas de la organización. Ellas recibían un ingreso extra aparte de los servicios prestados por esa acción”, contó Iza.
Puntualizó que la organización trabajaba de “manera muy segura”.
Según las investigaciones, los involucrados ofertaban servicios sexuales dentro y fuera de la ciudad, señala el informe.
“En los allanamientos se encontró un centenar de fotografías de chicas de la localidad y otras que aparentemente se bajaban de Internet”, afirmó.
“Hasta aquí hemos logrado establecer que 40 fotografías de menores corresponderían a chicas que fueron reportadas como desaparecidas”, indicó.
En el 2015 la Dinapen registró 312 denuncias de menores desaparecidas, de las cuales 303 fueron recuperadas y nueve casos están en investigación.