El malestar se debería, según dijo el presidente parroquial, por la ausencia de médico de planta y mejoras varias, pues consideran que el servicio que prestan no es suficiente para la extensa comunidad de 16 mil personas.
Esta queja se une a otras que generalmente se suscitan en las comunidades que demandan mejor dotación de personal médico, suministro adecuado de medicina y de materiales requeridos para la atención de los moradores del sector correspondiente.
Entendemos que el ministerio respectivo está esforzándose para ello, pero las sábanas que extiende parecería no logran cubrir las expectativas de los ciudadanos, especialmente con el aumento poblacional en la atención.
Vale, entonces, tomar en cuenta las demostraciones de insatisfacción en vez de tratar de acallarlas, pues ellas dan la pauta para el mejoramiento de las políticas que creemos cumplen lo programado.