Eso es lo que explicaron en esta redacción José Javier Guarderas, Eduardo Maruri y Juan Francisco Núñez, director, vicepresidente de la fundación UNO y coordinar para Manabí, quienes mantuvieron una reunión en Manta para ir escogiendo nombres de posibles candidatos a la Asamblea. Maruri dijo que están poniendo énfasis en la renovación de la clase política, escogiendo a gente “con calidad técnica y ética”, capacitada, que pueda actuar en política para que se puedan aplicar los cambios. “No se trata solamente de cambiar la Constitución y las leyes, se necesita un cambio en los actores sociales. Indudablemente ese es un proyecto a largo plazo, pero hay que empezar a trabajar, dijo el ex presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil. La propuesta de UNO es económica, administrativa y política. Primero, se debe ratificar la dolarización, corrigiendo en la Constitución que la moneda ecuatoriana es el sucre, que así se mantiene, y poner que es el dólar. “No se puede cambiar ese sistema económico porque afectaría a todos, no podemos olvidar que el 47 por ciento de la población ecuatoriana es pobre y la mayoría vive con 2 dólares diarios; un cambio les golpearía profundamente, acotó. El segundo punto es aplicar un modelo de administración autonómico de regiones, para que la riqueza sea mejor distribuida. “El modelo centralista está agotado”, acotó Maruri. Y el tercer planteamiento es que se garantice la gobernabilidad en el país y que los diputados sean elegidos en la segunda vuelta. Al preguntarle si eso no significa que se busque terminar la oposición dijo que, al contrario, con esto se garantiza que no se fragmente más el Gobierno. Buscando sangre nueva José Javier Guarderas explicó que UNO nació no como un proyecto a corto plazo sino como una apuesta a un proyecto diferente. La coincidencia con el llamado a consulta es solo eso, coincidencia, dijo. Acotó que hay que revalorizar la política, “ahí está nuestro gran reto”, por lo que estamos tratando de asumir sugerencias, inquietudes, planteamientos que terminen con el caudillismo y el regionalismo y den paso a la vocación de servicio de personas que quieren una oportunidad, recalcó.