"Deseo expresar mi profunda preocupación por las consecuencias económicas negativas que puede traer para los quiteños y ecuatorianos el Proyecto de Ley Orgánica para la Redistribución de la Riqueza que pretende imponer un nuevo esquema de impuestos a las herencias", dijo Rodas, según un comunicado de la alcaldía.

Añadió que en Quito, la capital de Ecuador, siete de cada diez empresas son iniciativas familiares, "que han sido construidas con el esfuerzo y el trabajo de ciudadanos que soñaron en dejar un futuro mejor para sus hijos".

"Por eso, esta propuesta legal afecta la aspiración de miles de familias de prosperar y trascender", apuntó.

Agregó que "no se puede lograr equidad sostenible en el largo plazo y convivencia pacífica y armónica de una sociedad, mediante la apropiación estatal de una fracción importante de los bienes adquiridos con riesgo y esfuerzo durante toda una vida".

Rodas añadió que la mejor forma para redistribuir la riqueza es generando y fomentando oportunidades y capacidades a quienes han carecido de ellas.

En las actuales circunstancias, opinó, se estaría desincentivando el afán de superación económica y la creación de patrimonio familiar para otorgar seguridad a los hijos, el espíritu emprendedor desde los pequeños y medianos empresarios, así como el estímulo para la creación de riqueza, ahorro, inversión y empleo de calidad.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, impulsa la conocida como Ley de Herencias con el objetivo de "democratizar la propiedad".

El proyecto establece nuevas tablas impositivas que gravan de forma progresiva el patrimonio heredado que, dice Correa, es una fuente de inequidad en Latinoamérica.

Por eso el proyecto persigue diluir la estructura familiar de las grandes empresas, algo que el mandatario considera un mal que contribuye a "la acumulación excesiva de la riqueza".

En Ecuador, según el Gobierno, menos del 2 por ciento de las familias poseen acciones en las empresas, lo que dificulta alcanzar la cohesión y eficiencia social que se pretende lograr por medio de la armonización de objetivos entre los hogares, el sector público y el privado.

Por otra parte, Rodas también se mostró "preocupado" por el proyecto de ley que reforma el régimen de plusvalía, una norma con la que el oficialismo espera combatir la especulación sobre la tierra y los bienes inmuebles.

"Si bien esta propuesta generaría ingresos adicionales a los municipios del país, lo cual es evidentemente necesario para asumir la gran cantidad de obras para nuestras localidades, esto no puede ser a costa de los ciudadanos, quienes legítimamente asumen riesgos y destinan sus ahorros para invertir en bienes inmuebles", dijo.

Los proyectos de ley sobre las herencias y la plusvalía han provocado manifestaciones en los dos últimos días, en los que críticos, opositores y oficialistas han expresado sus opiniones en las calles.

El Gobierno ha señalado que las manifestaciones obedecen a intereses políticos de sectores económicos poderosos que intentan impedir políticas que buscan redistribuir la riqueza concentrada en manos de las familias más ricas del país.

Las manifestaciones han ocurrido en Quito, Guayaquil y Cuenca y en las redes sociales circulan a diario convocatorias para mantener las protestas en las calles.

Rodas, quien cree que se deben retirar de la Asamblea ambos proyectos de Ley, formuló un llamamiento a las autoridades del Gobierno y de la Asamblea "a que escuchen la voz de los quiteños y de los ecuatorianos".

"No se puede ignorar ni descalificar el malestar que hay en los ciudadanos por los dos proyectos de ley que están en trámite; esa inquietad ciudadana es evidente e inocultable", dijo al considerar que se debe entablar un diálogo "auténticamente constructivo, que recoja los planteamientos ciudadanos". EFE