Además piensan en aproximar las posiciones que aún les separan sobre temas como la situación en Venezuela, el bloqueo estadounidense a Cuba o el cambio climático.
En tanto, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, y la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, firmaron ayer un acuerdo para convertir la Fundación EU-LAC en una organización internacional y entregaron los primeros premios de esta institución a dos proyectos de cooperación entre Europa y América Latina.
Esta fundación, con sede en Hamburgo (Alemania), es un proyecto conjunto entre la UE y Latinoamérica y el Caribe que trabaja en nombre de los gobiernos y los ciudadanos de los 61 países de la UE y la Celac.
Patiño, cuyo país ocupa la presidencia pro témpore de la Celac, se mostró confiado en que los líderes den a los titulares de Exteriores el mandato para que se reúnan “al menos una vez al año”, a fin de dar más continuidad a la relación entre las dos partes y teniendo en cuenta que las cumbres UE-Celac tienen lugar cada dos años.
ejes. Según dijo el presidente Rafael Correa a su llegada a Bruselas, la cumbre servirá para tratar también el eje de educación.
Correa indicó que Europa puede “ayudar muchísimo”, sobre todo en “apoyo para nuestras universidades, transferencia de talento humano, becas, y cambiar la institucionalidad mundial para el acceso al conocimiento”.
Además se tratará el tema migratorio y de cooperación entre ambas regiones como parte de la agenda. Del lado latinoamericano estarán ausentes el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro; la mandataria argentina, Cristina Fernández, y el líder de Cuba, Raúl Castro.