Jorge Cedeño, adulto mayor, insiste en la dificultad que tiene para subir al cuarto piso del edificio de la EPAM donde funciona la empresa de Parqueo Tarifado.
“No hay ascensor. Creo que no hay consideración para los adultos mayores. Me toca subir cuatro pisos para comprar al por mayor las tarjetas de parqueo, ya que abajo los vendedores cargan pocas”, anotó.
El sistema de parqueo comenzó a funcionar nuevamente desde hace tres meses, pues estuvo un año suspendido.