El hecho se suscitó al llegar al puente Larrea, de la parroquia San Antonio, dijo Álvaro Z.

La víctima indicó que uno de los asaltantes que iba  en un automotor desconocido le dijo que parara la marcha, mientras que con el otro vehículo intentaban cerrarle el paso.

Según el perjudicado, al percatarse de que iban a ser víctimas de asalto aceleró la marcha, con la finalidad de perder a los antisociales, y éstos empezaron a dispararles.

Álvaro Z. indicó que al momento que sucedió el intento de asalto venía del cantón Pedernales con su esposa y dos amigas, luego de haber asistido a rendir una prueba académica para ser maestros. 

A matar. El perjudicado mostró el vehículo, en el que se observa que varios proyectiles impactaron en el parabrisas, el capó y la ventanilla, y recalcó con nerviosismo que el objetivo de los pistoleros era que frenaran a cualquier precio, sin importarles sus vidas.

Sólo una bala rozó el brazo izquierdo del conductor, quien pudo escapar junto a sus acompañantes.