El motivo, según informó José Gilces, presidente de la Asociación de Sacrificadores y Expendedores de carne de Charapotó, es en señal de protesta por los nueves meses que lleva cerrado el camal de la parroquia.

Gilces señaló que el no tener un camal genera que deben ir hasta Bahía de Caráquez donde hay un local más pequeño e incómodo porque deben compartirlo con matarifes de otros sectores.

Aún así,  dijo que, lo más grave es que se exponen a la delincuencia y el dia domingo un grupo de comerciantes fue asaltado a mano armando, se les llevaron el vehículo y las reses. Ante eso el martes se reunieron en Portoviejo con los funcionarios de Agrocalidad solicitando la repaertura del camal, sin embargo aquello no se logró porque no se cumplen con algunos pedidos, dijo.

Ante esa respuesta, indicó que, decidieron que no trabajarán y a esta medida se han integrado los representantes de las tres asociaciones de expendedores de legumbres y afines. 

Víctor Gilces, vendedor de legumbres, dijo que lo hacen en señal de unión y solidaridad.