Una serie de problemas socio políticos se han generado al efectuarse los cambios de mando en los GAD – municipales. Los funcionarios entrantes, en su generalidad, expresan no haber recibido toda la información requerida y necesaria por parte de sus antecesores. En muchos cantones la labor no existió y los nóveles ejecutivos denuncian enormes déficits presupuestarios, inexistencia de dinero en las arcas para cumplir obligaciones de sueldos y salarios atrasados, así como los fondos van a fideicomisos con entidades financieras en cifras que compromete casi la totalidad de los recursos asignados a cada GAD. Igualmente, pagos y contratos de últimos días que agravan el estado financiero cantonal respectivo; los salientes dicen al paso que todo es legal y lo que ocurre es que los fondos siempre son insuficientes para suplir las múltiples necesidades.
¿Quién tiene la razón? Es difícil llegar a establecerlo. Tiene que haber una intervención rápida de Contraloría y que se agiliten informes oportunos, si no el tiempo pasa y las denuncias quedan atrás.
Mientras, el día a día de la problemática municipal respectiva desespera a los nuevos administradores, que de a poco van cerciorándose de una serie de contratos para obras, unas realizadas bien, otras con observaciones técnicas de bulto; las de más allá se están destruyendo, otras abandonadas a la buena del tiempo. ¿Quién responde por ello? Mientras nuevos reclamos exigen realizaciones y soluciones ya. El panorama descrito es casi general, pocas las excepciones.
Las acciones para que los GAD cantonales vayan adelante son duras. Poner la casa en orden, actualizar datos y proyectos, hay que laborar con tesón y tratar de obtener recursos para terminar obras y ejecutar nuevas y muy urgentes: agua potable, canalizaciones, aseo, disposición de desechos, extender servicio eléctrico, salud ambiental, lo más urgente. Por todo lo anotado, consideramos que, de acuerdo con el COOTAD, tiene que lograrse de urgencia una participación ciudadana; que en cada sector sus habitantes en forma colectiva se organicen para ejercer sus derechos: acceso a la Ley de Información de la cosa pública, a participar en realidad para ayudar a que cada administración de un GAD cantonal, su alcalde y concejales, se sientan respaldados en su buen accionar para un verdadero servicio a sus representados.
Que se conozcan en detalles las prácticas administrativas legales y patrióticas, con transparencia total en el manejo financiero que revierta cada dólar manejado en una inversión positiva. Que cada contrato culmine en tiempos y plazos y que todos confiemos que alcalde y concejales orgullosamente representan nuevos días positivos para sus conciudadanos.
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