La obra, que estuvo a cargo de Carlos Javier Alcívar, consistió en la construcción de la segunda y tercera planta sobre las oficinas principales y de dos calabozos para mujeres y choferes,  así como la colocación de una visera en el patio posterior para el estacionamiento de las motocicletas policiales.

La obra fue entregada el miércoles por el alcalde Hugo Cruz, en un acto en el que el jefe policial, Jaime Enrique Salazar, expresó su agradecimiento en nombre de la entidad uniformada.

El 13 de junio del 2006 una turba enardecida incendió y destruyó el cuartel policial y varios vehículos, por lo que el municipio destinó recursos para construir nuevas instalaciones por etapas.