Uribe cumplió así su cita con la Procuraduría, que es el organismo encargado del control disciplinario en Colombia, en el marco de sus acusaciones sobre la supuesta financiación de la deuda de la campaña santista de 2010 con dos millones de dólares de dudosa procedencia.

"Manifiesto que no he recibido información contra la persona del presidente de la República pero sí serias y graves informaciones contra su campaña", aclaró Uribe al leer un comunicado a los medios congregados en la puerta de la Procuraduría.

Uribe explicó que hizo esta afirmación porque tiene "obligaciones con la patria y con el ejercicio leal de la política, en aras de la verdad, que es indivisible", por lo que considera que debe predominar su respeto a las instituciones sobre su "interés electoral inmediato".

El expresidente y senador electo es la figura central del movimiento político Centro Democrático, cuyo candidato a la Presidencia, Óscar Iván Zuluaga, se encuentra en empate técnico con Santos de cara a la segunda vuelta del próximo 15 de junio.

En concreto, las acusaciones de Uribe sobre el supuesto caso de financiación ilícita, vertidas en la primera parte de una campaña salpicada de escándalos, involucraba directamente al exasesor de propaganda de Santos, el publicista venezolano Juan José Rendón.

En esos días trascendió que en 2011 Rendón y otro exasesor presidencial, Germán Chica, habían ejercido como mediadores ante el presidente de un grupo de grandes narcotraficantes, hoy detenidos o entregados a la justicia, para un negociar un sometimiento que nunca ocurrió.