Sara, es madre de dos niños, y dice que los hombres la aman debido al gran tamaño de sus "pompis".
Según cuenta, Sarah, sufrió mucho por su figura y fue objeto de burlas. Ahora a sus 33 años, Sarah ha aceptado su físico y participa de sesiones fotográficas sexy para aquellos caballeros que “aman su físico”.
“Pasé por una etapa de preocupación continua de lo que pensaba la gente, pero ahora quiero mostrar al mundo que estoy orgulloso de ser yo.”
Sarah contó en una entrevista que le encanta su trasero, pero desea que sea un poco más pequeño.
“Estoy tratando de sacar el máximo provecho de lo que me han dado y estar seguros de lo que soy me hace feliz. Si puedo inspirar a otras mujeres a aceptar sus curvas y ser mujeres orgullosas, hermosos, yo sería muy feliz.”; dijo Sarah.