Durante una presentación en Las Vegas, la cantante Beyonce le cumplió su mayor deseo a Taylon, una niña de 13 años con un tumor cerebral inoperable, cuyo sueño era bailar con ella.
Después de cantar algunas canciones, Beyoncé interrumpió el concierto, se acercó a la pequeña y le dio un abrazo.
Luego interpretaron juntas "Love on top" y "Survivor". Taylon, que estaba sentada en su silla de ruedas al lado de la tarima, no pudo contener las lagrimas.