La exposición estará abierta hasta el 20 de enero del 2014. 

Muchos ha recordado a Gonzalo Endara Crow como el artífice de una pictórica denominado realismo mágico en la que hay un derroche de color y formas fantásticas en cada uno de sus productos.

En las tres décadas en las que se dedicó al arte que son los años 70, 80 y 90, Endara supo asumir una postura temporal respecto del lienzo.

La muestra está liderada por su hija Fátima Endara, quien señala que en esta ocasión se han escogido 40 piezas en las que se pone énfasis en la otra cara de su padre. 

Están presentes piezas como los retablos, pocas veces expuestos al público y que fueron ampliamente desarrollados por Endara en sus primeros años como pintor. Asimismo, en la sala dedicada a los años 90 aparecen rostros que distan mucho de las tejas, pueblos y paisajes montañosos que caracterizaron al artista.