Así lo consideran varios padres de familia y  con ellos coincide Filerma Nieto, orientadora del colegio Manta. En este tiempo de descanso es oportuno porque los padres podrán compartir más con sus hijos y fortalecer la unión familiar.

Filerma Nieto cree que estas vacaciones son oportunas porque la familia podrá vivir a plenitud la temporada navideña.

Los padres y los hijos deben aprovechar para reunirse en el desayuno, almuerzo y merienda para conversar de lo que han hecho el año pasado y las aspiraciones del año venidero.

A pesar de que los padres no tienen vacaciones en sus trabajos, los hijos pueden esperarlos con una sorpresa y de ese modo dinamizar su corta estadía en casa.  

También pueden salir juntos a hacer las compras navideñas, preparar la cena y hasta salir al parque o algún otro lugar juntos. 

El fin es el mismo: pasar un rato agradable y en familia.

Según Marcela Ariza de Serrano, profesora de la especialización Desarrollo familiar y personal de la Universidad de La Sabana en Colombia, lo ideal sería delegar el cuidado de los hijos durante el día a los abuelos, quienes, después de los padres, son quienes más los aman. 

Esto sería hasta que los progenitores terminen su jornada laboral. 

Luego de ello podrían salir a cenar fuera todos.

Aquí lo importante es compartir el tiempo entre todos.