Actualmente es el presidente de la Asociación de Productores de Arroz de la Zona Baja de Rocafuerte, una organización con trece años de trayectoria, y que en la actualidad cuenta con un terreno para una planta procesadora.
Cuenta que se inició en la dirigencia por la orientación que recibió del padre salesiano Juan Palomino, y desde que comprendió que los productores de arroz eran los que menos se beneficiaban con relación al comerciante, que recibe las ganancias del negocio. Su gran aspiración es lograr que el campesino llegue a tener una cédula que lo identifique como tal y tenga beneficios.