Desde temprano los integrantes de las 46 instituciones, en su mayoría escolares,  se ubicaron en la calle 7 de Agosto, luego tomaron la Bolívar hasta llegar a la altura del Banco Nacional de Fomento. A su paso iban inundando de ritmo y colorido los sectores abarrotados de personas.

Así, unas delegaciones se caracterizaban por bailar danzas, otras por representar las viejas costumbres del cantón y otras más por hacer representaciones de programas de televisión. “El objetivo es demostrar nuestro homenaje al cantón”, dijo Samantha Alcívar, bastonera del colegio Augusto Solórzano que subida en tres tambores de guerra demostraba sus habilidades en el equilibrio y en el xilófono.

El resultado de tantos ingeniosos números folclóricos se lo disfrutaba en las veredas, desde donde los ciudadanos, apretados y emocionados,  aplaudían.

 

felices. Nubia Villacías, habitante de Chone y ahora integrante del Consejo Nacional Electoral, dejó a un lado las oficinas del organismo para llegar a ver el desfile. Dijo que se emocionó viendo el esfuerzo de sus coterráneos y recordó sus tiempos en que ella misma desfilaba. Camila Marañón, la reina, también felicitó a quienes marchaban por civismo.