Las familias aseguraron que cada vez que llueven sufren deslizamientos de tierra e inundaciones.
Las paredes de la casa de Leopoldo Santana, ubicada en las laderas del cerro El Mirador, están llenas de lodo que bajó raudo.
En cambio, algunas paredes de la casa de la familia Quimís Baque están cuarteadas por la acumulación de lodo y agua lluvia.
Maryuri Bailón mostró cómo una parte del callejón de su vivienda, de un piso y de estructura de hormigón, está con fisuras.
reclamos. “Sólo vienen, toman fotografías y se van. Queremos obras urgentes para evitar que nuestras casas sigan destruyéndose por los deslizamientos de tierra”, dijo Emperatriz Bailón Quimís, al reclamar por la poca ayuda de las entidades de auxilio.
La casa de Abel Quimís, también está destruida.
En el Cerro Mirador 2, al otro extremo de la parroquia, también hay familias que viven en zona de riesgo.
Darío Bailón y sus familiares temen que su casa se vaya al abismo por los deslizamientos de tierra.
El presidente de la Junta Parroquial de La Pila, Neptalí Santana, dijo que ya informó a los directores de la Secretaría de Riesgos los problemas que sufren los pilenses.