Los latinos llegan para apoyar al pedido hecho por el presidente Barack Obama a los miembros del Congreso, por una reforma justa y humanitaria a las leyes de inmigración de los Estados Unidos, a favor de más de 15 millones de estudiantes, obreros y sus familias.

EXPECTATIVA.    Desde la víspera, cientos de ecuatorianos e iberoamericanos llegaron por aire y tierra a la capital, para hacer sentir su presencia y visitar las oficinas de los senadores, que deberán otorgar su voto a favor, o en contra, del proyecto de ley, que fue encargado a un grupo bipartidista de 4 senadores republicanos y 4 demócratas.  

Aunque se trata de un asunto de inmigración, todos los miembros del Congreso, y el mismo presidente Obama, saben muy bien que su futuro político dependerá de la manera como ellos decidan votar sobre la propuesta de ley.