Aunque se trata de un asunto de inmigración, todos los miembros del Congreso, y el mismo presidente Obama, saben muy bien que su futuro político como oficiales electos, y el de su partido ya sea Demócrata o Republicano, dependerá de la manera como ellos decidan votar sobre la propuesta de ley, ya que también estará en juego la seguridad nacional, si no hacen nada positivo para mantener en los Estados Unidos, la fuerza laboral a bajo costo, que está sosteniendo la economía en el país.

Sin duda el interés del demócrata Barack Obama,  es corregir su incumplimiento a la promesa electoral que hizo a los Hispanos, en su primera aspiración presidencial, sobre una reforma migratoria a favor de 15 millones de indocumentados, que le permitió arrasar en la votación nacional, al obtener el sufragio mayoritario de los latinos, que lo convirtieron en el primer Presidente de la raza negra en la historia de los Estados Unidos.

Aun así, los iberoamericanos que son ciudadanos y pueden hacer uso del poder de su voto, volvieron a respaldar a Obama, en su aspiración reeleccionista, con la esperanza de que el cumpla su palabra en el segundo término.

Cientos de ecuatorianos, junto con miembros de otros grupos étnicos, que perdieron el miedo a Inmigración, participarán en la marcha de este miércoles, 10 de abril, a favor de una reforma migratoria justa y humana.

 

Especial para El Diario: Theo Rodríguez