El régimen de Pyongyang recomendó el lunes a los extranjeros residentes en Corea del Sur que preparen planes de evacuación ante la posibilidad de guerra inminente, un paso más en su persistente campaña de amenazas belicistas cuyo final no se advierte cercano.
Los aproximadamente 1,4 millones de residentes foráneos en Corea del Sur deben "saber dónde refugiarse" y "estudiar los planes de evacuación para salir del país", ya que el gobierno totalitario norcoreano, explicó uno de sus portavoces, "no quiere ver a los extranjeros del Sur afectados si estalla una guerra".