Los científicos aseguran que un acontecimiento de alimentación similar ocurrirá, "pronto", en el agujero negro del centro de la Vía Láctea.
El descubrimiento en la galaxia NGC 4845, a 47 millones de años luz de la Tierra, fue "completamente inesperado" según el profesor de la Universidad de Bialystok (Polonia) y autor del artículo publicado en Astronomy & Astrophysics, Marek Nikolajuk.
El suceso fue observado durante el año 2011, según informó la ESA, que precisó que en el seguimiento participaron el Observatorio Integral Espacial, el XMM-Newton de la propia ESA, el Swift de la NASA y el monitor de rayos X japonés MAXI de la Estación Espacial Internacional.
"Esta galaxia ha estado tranquila durante al menos 20 o 30 años", señaló Nikolajuk.
El hallazgo tuvo lugar cuando los astrónomos del observatorio espacial integral de la ESA estudiaban una galaxia diferente y avistaron una llamarada brillante de rayos X proveniente de otra ubicación.