Varios países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) lograron en la asamblea extraordinaria de la OEA su objetivo de dejar abierta la puerta a nuevas reformas de la CIDH, pero fracasaron en su intento de cambiar su forma de financiación.

 

Documento. La SIP destacó en un comunicado que la resolución, aprobada por unanimidad, "respeta la autonomía financiera de la CIDH y establece la continuidad del diálogo sobre aspectos fundamentales para el fortalecimiento" del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH).

"Gracias a su respaldo, ha quedado excluida, al menos por el momento, la posibilidad de incorporar reformas que podrían afectar la misión de la CIDH y, en particular, de su Relatoría para la Libertad de Expresión", aseguró el presidente de la SIP, Jaime Mantilla, en diversas cartas enviadas a presidentes y representantes diplomáticos ante la OEA.

Mantilla, director del diario Hoy, considera que la decisión de la OEA es un "avance significativo" y promete que la SIP "permanecerá vigilante ante cualquier iniciativa para debilitar en sus competencias a la Relatoría para la Libertad de Expresión y la CIDH".

Ecuador continuará impulsando las reformas a la CIDH, así lo dio a conocer su embajadora ante la OEA, María Isabel Salvador.

"La Comisión no puede irse en su reglamento en contra de lo que establece su estatuto y la Convención Americana", dijo Salvador.