El caso ocurrió en San Vicente.
Su abuela, Deysi M., fue la que contó que al ver que la niña estaba inquieta y que no quería comer, su hija, de 17 años de edad y madre de la menor, fue hasta su casa llevándole a la pequeña.
Los familiares trataron de calmar a la infante con pastillas, sin embargo continuaba delicada de salud e incluso ya no quería comer.
Su abuela la trasladó hasta el hospital Miguel H. Alcívar, de Bahía de Caráquez, donde le realizaron una radiografía.
Fue en esa casa de salud donde los médicos, luego de revisar el examen,  notaron que la pequeña estaba atragantada con una moneda, la cual se puede observar sin dificultad en la radiografía. Ayer la niña fue derivada al hospital Verdi Cevallos, de Portoviejo, donde se esperaba que el cirujano Jacinto Kon, experto en este tipo de atragantamientos, le retire la moneda.<