Así lo confirmaron funcionarios de la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (Senescyt).

Actualmente se pule el reglamento que cambiará la forma de distribución de los recursos para las universidades públicas de Ecuador.

La Senescyt adelantó que la nueva escala de presupuesto anual por estudiante sería: para las universidades “D”, 1.478 dólares; para las “C”, $1.792; para las “B”, $1.917, y para las “A”, $2.941. Este cambio e incremento del presupuesto será gradual para alcanzar el 100% en los próximos cuatro años.

Hasta ahora una universidad pública de categoría “A” percibía anualmente por estudiante 2.158 dólares y una de categoría “D”, 9.549. 

Del Fondo Permanente se destinaban 184 dólares por estudiante para las universidades “A” y 849 para las “D”. 

El presupuesto, dijo René Ramírez, titular de la Senescyt, era inversamente proporcional a la calidad, por lo que calificó de perverso al modelo actual. Según el funcionario, este esquema es inverso a la 

calidad. 

Dijo que se calcula, según la cantidad de estudiantes, las necesidades, las carreras, la eficiencia administrativa y la inversión, lo que, a su criterio, ha significado como decir: mientras más carreras y alumnos, mayor presupuesto. Así, las universidades estaban invirtiendo entre el 45% y 70% del presupuesto en gastos administrativos y no académicos, lo que es poco entendible, según 

Ramírez. 

El Estado ecuatoriano invierte unos 1.155 millones de dólares anuales en los centros públicos de nivel superior, lo que, según Ramírez, equivale al 1,84% del Producto Interno Bruto. 

Esos recursos en números gruesos se distribuyen así: 746 millones de dólares en el Fondo Permanente de Desarrollo Universitario y Politécnico; 65 millones de dólares en institutos, 155 millones de dólares en universidades públicas de pregrado, 5 millones de dólares en universidades públicas de posgrado, 14 millones de dólares en universidades privadas cofinanciadas y 130 millones de dólares en la Senescyt y el Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior. <