La advertencia la hizo el consejero Juan Pablo Pozo, la tarde de ayer, en una rueda de prensa mediante la cual se detallaron las inconsistencias encontradas al revisar una muestra del 10% de las firmas de los once grupos registrados para participar en las elecciones del 2013.

“Si el Consejo tomó la decisión de reprocesar (las firmas de) todas las organizaciones es para una depuración; es decir, encontrar la información verídica y si en su momento la agrupación política tuvo la personería jurídica con una información que no era la real y que indujo al error a la autoridad electoral... Si (ahora) no completa el número de firmas requerido, tendría que dejarse sin efecto esa resolución con la cual se otorgó la personería jurídica en su momento”, dijo Pozo.

Minutos antes de ese anuncio, el presidente del Consejo, Domingo Paredes, aseguró que no está en juego la seguridad jurídica de las organizaciones, “pero si las firmas son falsas, pasarán a la Fiscalía”, por tratarse de un delito, comentó.
En la lupa del CNE están el MPD, PRE, Alianza PAIS (AP), PSP, CREO, Avanza, Ruptura, Concertación, Prian, PSC y Pachakutik. 
Paredes explicó que la revisión del 10% de las firmas se realizó tomando en cuenta cuatro variables: las firmas válidas; las no válidas, que implica que no fueron compatibles o que no se parecían; las no firmas, que son las que preocupan, porque no hubo base de datos para compararlas; y las suspensas, que son las que entraron en revisión de los grafólogos.
El titular del CNE ratificó que el martes próximo se reunirá el Consejo Consultivo con las agrupaciones, para “conjuntamente ver una salida a esta crisis”. Ese día se decidirá cuándo se iniciará el reprocesamiento del 100% de las rúbricas.