Las fuentes de energía renovable como la solar, hidráulica, eólica, de la biomasa, fotovoltaica entre las principales, están siendo utilizadas cada vez por muchos países en el mundo, no sólo como una alternativa técnico-económica a la crisis del petróleo, sino como una singular respuesta a los efectos negativos que sobre el hombre y la naturaleza, viene acumulando el uso de la energía convencional. Las energías alternativas van ganando espacio en la sociedad actual; en nuestros días el incremento de los combustibles fósiles y problemas medio ambientales han devuelto el protagonismo a estas energías, que tienen a su favor que son limpias e inagotables; entre éstas la más opcionada es la fotovoltaica solar, con la colocación de generadores en cualquier lugar donde llegue el sol. Su utilización es viable en zonas donde no llega la red eléctrica, como granjas y, en especial, en viviendas rurales apartadas.

La energía solar es un método seguro y de costo efectivo de llevar luz (iluminación) y programas educativos de video a escuelas en áreas remotas de nuestra geografía;  su costo se compensa, pues es una fracción del costo que representa la extensión de líneas utilitarias hasta estos lugares, otra aplicación vital es el bombeo para pozos de agua poco profundos con la instalación de una bomba sumergible, la que es alimentada directamente por los paneles solares; además, el cuidado de la salud es problema serio en zonas muy apartadas por la falta de refrigeración y electricidad; un refrigerador de vacunas alimentado por paneles solares es una solución confiable y de costo efectivo en pueblos remotos y esta energía es una tecnología ya probada que requiere de un mantenimiento mínimo.
En nuestro país actualmente se están impulsando algunos proyectos, especialmente energía eólica en la provincia de Loja y Galápagos; y en nuestra provincia de Manabí existen planes a futuro para proyectos de energía solar con financiamiento coreano. <