En sí, hasta el año pasado había un promedio que fluctuaba entre 250 y 300 toneladas, aseveró Orlando García, director de Higiene de la municipalidad; sin embargo, la última cifra persiste en estos meses y ya se estableció como el índice de producción, complementó.

Por su parte, Alexandra Mendoza se sorprende cuando circula con su carro por diferentes barrios. Ella ve a diario mucha basura acumulada en sectores como Los Tamarindos, que luego es recogida, pero de inmediato comienzan a formarse otra vez los montículos. "Da la impresión como que producimos más basura", dijo.

Sin embargo, el problema radica cuando la basura es dejada en las aceras o en una esquina específica, en horarios que no son los respectivos para el paso del recolector; entonces los desechos son regados por el viento o por animales (los perros principalmente) que los escarban.

Otros dejan las fundas de basura guindadas en las cercas, provocando una mala imagen.

Los ciudadanos deben aprenderse los horarios, para dejar la basura en el exterior de la casa cuando pase el recolector por  su sector, sugirió García, y no acumularla en las calles ni en mini botaderos en las esquinas.

No obstante, han habido casos en que ni el horario ni el recorrido se cumple. Lucciola Macías espera que los martes, jueves y sábados recojan su basura en la ciudadela Bellavista, pero han faltado y llegan en otro día de los ya definidos, desconcertándola. Igual, ella recomienda que si no pasa el recolector, se mantengan los desechos en casa.

García ha justificado esta situación y ha explicado que la causa más común es el daño de alguno de los carros recolectores, que alteran todo el cronograma.

En la actualidad, mencionó que se cuenta con los seis de la municipalidad, y que además se arregló un séptimo que está inutilizado. También recorren la ciudad 12 volquetes contratados.

 

 muladares. Es habitual que, sabiendo o no el horario, las personas se deslindan de su basura acumulándola junto a otros vecinos en un punto de la calle.