En un fallo de casi cien páginas, que se puede ver hoy en los registros electrónicos del sistema judicial estadounidense, el juez Lewis Kaplan rechaza los argumentos de las demandantes que pedían que no se investigue en EE.UU. el presunto fraude, al considerar que las acusaciones ya habían sido dirimidas en Ecuador.

El magistrado, de la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York, considera en el escrito que se han presentado "evidencias" suficientes de una conducta "impropia" por parte de los abogados de los demandantes en el juicio que se sigue contra la petrolera estadounidense en Ecuador.

"Este paso es sumamente importante para nosotros porque nos va a permitir seguir con nuestra línea de defensa y desmontar el fraude perpetrado por un grupo de abogados sin escrúpulos", afirmó a Efe el portavoz de Chevron, Jim Craig, quien reiteró que la petrolera seguirá luchando para "desenmascarar" lo ocurrido.

En el mismo fallo, el magistrado neoyorquino considera que todavía es "prematuro" decir que el fallo emitido por la justicia ecuatoriana, que impuso a Chevron la mayor sanción de la historia en un juicio por daños medioambientales, "no es aplicable en su jurisdicción".

Para la portavoz de los demandantes ecuatorianos en EE.UU., Karen Hinton, la decisión del juez Kaplan es un nuevo "contratiempo" para la petrolera, a la que criticó por "evadir sus obligaciones legales" y no limpiar la zona contaminada en los años setenta y ochenta (del pasado siglo), y dijo que seguirán luchando para "retener" los activos de Chevron.

La petrolera fue condenada por un tribunal de Ecuador a pagar más de 19.000 millones de dólares como indemnización por los "graves daños ambientales" causados en la Amazonía ecuatoriana entre 1964 y 1990, años en los que operó en el país Texaco, que fue adquirida después por Chevron.

La petrolera, que reniega de la justicia ecuatoriana, sostiene que se perpetró un supuesto fraude en su contra por parte de los demandantes que han iniciado acciones para cobrar el monto de la condena que en principio ascendía a más de 18.000 millones de dólares.

La Corte de la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, donde se llevó adelante el proceso, precisó el pasado 23 de julio que la cuantía de la sanción era de 19.021.552.000 de dólares, tras incorporar rubros correspondientes a honorarios y costas judiciales, según explicó entonces uno de los letrados de la acusación, Pablo Fajardo.

La petrolera acusa en concreto a los abogados de los demandantes de haber hecho pagos ilegales por hasta 100.000 dólares a un perito independiente, Richard Cabrera, quien recomendó en 2008 que la multinacional pagara 27.000 millones de dólares por la contaminación supuestamente provocada en la Amazonía.