En una investigación hecha durante dos años por el departamento de Investigación de la Uleam se determinó que el 98% de la captura de langostas en varias localidades del centro sur de Manabí, son organismos pequeños, por debajo de la talla mínima legal, que son 26 centímetros (cm.) de longitud total (15 cm. de longitud de cola),

La veda de la langosta inició el 15 de enero y durará hasta el 16 de junio. Dura seis meses anualmente.

Los resultados de las investigaciones realizadas por la Uleam indican la presencia de hembras sexualmente maduras pequeñas (51,7 milímetros de longitud de parte del cuerpo de los crustáceos) en las capturas.

Según los investigadores el recurso langosta verde en Manabí se encuentra en un posible proceso de agotamiento por lo cual se deben considerar alternativas de manejo y evaluación pesquera periódica.

 

 pescador. Gregorio Mero Bermello, pescador que captura langostas en las costas de Jaramijó, es consciente del problema y asegura que últimamente el crustáceo se lo captura muy pequeño.

“Hay compañeros que no toman conciencia de esto que en el futuro afectará”, dijo Mero.

El comerciante Washington Delgado Espinoza recordó que en 1971 se capturaban langostas de menos de 27,5 cm. de longitud total y en el 2001 los pescadores cogían la especie de 19,5 cm.

Delgado cree que los controles se deben dar en altamar y en las embarcaciones porque los pescadores siguen capturando langostas muy pequeñas.

El dirigente pesquero Raúl Paladines comparte la opinión de Delgado y agrega que se debe incrementar los periodos de veda.

“En otros países del sudeste asiático, Australia y la costa californiana que son rocosas hay veda de langosta que duran hasta más de 5 años”, indicó Paladines.

“Creemos que la veda en nuestro medio no tiene una base técnico-científica apropiada, pues todos los estudios que ha realizado el Instituto Nacional de Pesca, INP, han sido estudios rápidos”, señaló Figueroa y propone que la veda sea desde junio a enero del cada año, es decir 8 meses..  

 

 autoridad señala. 

Para el director Nacional de Pesca de la SRP, Douglas Burgos Campuzano, el trabajo realizado por la Uleam es bueno, pero aseguró que el problema se centra en los pescadores que realizan esta actividad.

Para el funcionario si los pescadores capturan la especie mientras está en reproducción, se afecta a la especie. “Desgraciadamente la SRP no cuenta con la suficiente cantidad de inspectores (sólo 30) para estar en cada una de las caletas pesqueras donde se realiza esta actividad”.