Desde el recinto Santa Bárbara, donde el martes a las 21h30 fue mordida por el ofidio, los bomberos la trasladaron hasta dicha casa de salud, por una llamada de auxilio que recibieron, manifestó el jefe de operativos de la Casaca Roja, Roberto Peñafiel.

Marcia Merchán y Martha Alay, hija y mamá de la fallecida y otros familiares manifestaron su inconformidad porque supuestamente la señora no recibió una atención adecuada en dicha casa de salud.

Añadieron que no es aconsejable que una mujer que está embarazada le aplique una inyección a una persona que ha sido mordida por una serpiente porque le provoca un estado de coma, y eso fue lo que sucedió con su ser querido, expresaron.