Pasó en la calle Coronel Sabando, que de acera a acera estaba cubierta de agua.

Lo mismo en la calle Cristo Rey, o Seminario, donde fluía abundante agua desde un sumidero en media vía.

Sin embargo, no sólo son las calles las que se inundan, también son las casas.

Ruffo Montoya llamó ayer desesperado a El Diario, para que un equipo de este medio constate lo que le estaba pasando.

Contó que una vez que llovía, comenzó a inundarse su hogar, ubicado en la calle Elías García y avenida del Ejército. De inmediato se dirigió al baño para comprobar que el agua se regresaba por el desagúe colocado en la tina. Acudió por instinto a ese lugar, porque el domingo pasado le ocurrió lo mismo, y la fuente del problema fue ahí.

Él especula que ha habido trabajos antitécnicos en la instalación del sistema de alcantarillado, en la reconstrucción de la avenida del Ejército.

 

PROBLEMA. Es que con las lluvias, desde la segunda semana de enero ha habido taponamientos de sumideros en algunos sectores de la ciudad, que han provocado grandes charcos que impiden el paso de los peatones de las aceras a las calles.

Lenin Mendoza Bowen, director técnico de la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Portoviejo (Epmapap), mencionó que un promedio de 12 y 15 llamadas de emergencia por tal situación se reportan a diario, en estas fechas de precipitaciones, ya sea por rebose de aguas lluvia, o servidas.

Todo esto se da a pesar de que la Epmapap emprendió, en diciembre pasado, un proceso de limpieza de sumideros. 

Mendoza explicó que se han limpiado las cámaras de los sumideros ubicados en las esquinas de las calles, como también los conductos en medio de las vías; no obstante, se ha acumulado lodo dentro de las tuberías que conectan ambos compartimientos.

Eso es lo que provoca que el agua se rebose tras entrar a los sumideros.

No obstante, se está trabajando con un sifonero para limpiar el sistema, y sólo en caso de emergencias por rebose de aguas servidas. <

 

Medidas aisladas contra lodo