El sargento en retiro del ejército Arbey Delgado, de 43 años, dijo que presentará la demanda en la segunda quincena de enero cuando algunos organismos como la Procuraduría retornen de su asueto de Navidad.

El abogado de Delgado, Nelson Ricardo Esteban, explicó telefónicamente a The Associated Press que "lo que se pretende es un reconocimiento y un resarcimiento de los daños y perjuicios morales que se les causó con ocasión del secuestro tanto a mi cliente como a sus familiares. Eso es lo que se pretende conciliar".

En caso de concretarse, la de Delgado -que precisamente por su inconformidad pidió su retiro en noviembre- será la primera demanda contra el Estado por parte de un integrante de la fuerza pública que regresó a la libertad tras estar retenido por las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El ejército dijo no estar de acuerdo con las quejas de Delgado.

La sargento Sandra Vargas, una psicóloga que se ocupa de atender los casos de militares secuestrados y desaparecidos y de acompañar a sus familiares, explicó en diálogo telefónico que a Delgado se le brindó todo el tratamiento médico y psicológico posible y se mostró extrañada por su reclamo. Observó que el suboficial incumplió muchas de las citas médicas que se le programaron. "Uno no puede estar detrás de los pacientes", dijo.

"El tratamiento médico fue cero y el tratamiento psicológico fue de un 30%", se quejó Delgado.

Vargas recalcó que la familia del suboficial recibió atención durante los 12 años que permaneció cautivo y que ya en libertad fue ascendido al grado de sargento mayor.

Según Delgado, el ejército no le permitió tomarse las vacaciones que había pedido poco antes de caer en poder de las FARC en un asalto el 3 de agosto de 1998 a una base en la localidad de Miraflores, en el departamento de Guaviare y a 430 kilómetros al sureste de Bogotá.

La eventual demanda es "por abandono del Estado después del secuestro, porque no me permitieron salir a vacaciones días antes de la toma a Miraflores, porque en la toma de Miraflores faltó apoyo de la fuerza pública y por no habernos apoyado durante el combate que duró tres días", explicó Delgado en entrevista telefónica con la AP.

Según dijo, por esas aparentes fallas del Estado sus pretensiones económicas son por un monto superior a los 14.000 millones de pesos (unos 7,3 millones de dólares).

El abogado Esteban explicó que si en la Procuraduría "no se llega a lograr un acuerdo conciliatorio entre las partes, pues se procederá a instaurar la correspondiente demanda de reparación directa".

El jurista dijo que las entidades a demandar son la nación, el Ministerio de Defensa, las fuerzas militares y el ejército. Precisó que el próximo 17 de enero radicará en la Procuraduría todos los documentos para la eventual conciliación.

Delgado fue rescatado por el ejército en las selvas del sur de Colombia junto con tres oficiales de la policía el 13 de junio de 2010.

"No conté con la misma suerte de los compañeros que salieron conmigo (del cautiverio)" porque ellos "se fueron para el exterior y fueron mejor recibidos. Uno está en España (el general Luis Mendieta) y los otros dos se fueron para Chile con sus familias (los coroneles William Donato y Enrique Murillo)", relató.

Agregó que "a mí no me mandaron... pese a que pedí que me sacaran al exterior".

Delgado, padre de tres hijos, aseguró que habló con dos generales del ejército para que atendieran su solicitud pero no obtuvo respuesta.

Comentó que hubiera querido ir a Estados Unidos o a algún país de Europa pero lo único que le ofrecieron "fue el Sinaí (donde Colombia tiene un batallón en la Fuerza Multinacional de Paz y Observadores), pero resulta que el Sinaí es un desierto donde uno va solo, sin la familia. Es inaudito uno salir de 12 años sin ver la familia e irse para el Sinaí solo".

El sargento alegó que, entre otras cosas, buscaba esa salida del país por razones de seguridad "porque yo fui rescatado" y no liberado por las FARC, que según las autoridades podrían tomar represalias contra los ex cautivos.

Explicó que sale a la calle sin escolta mientras sus ex compañeros de cautiverio se trasladan escoltados en camionetas.

A mediados de 2010 la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, también rescatada por el ejército en julio de 2008, intentó demandar al Estado por una millonaria suma por los supuestos daños y perjuicios causados durante su secuestro de más de seis años.

Pero pocos días después, y ante una ola de críticas,la política franco-colombiana retiró la demanda.