El accidente, en el que murieron más de 250 personas, ha venido a exaltar los ánimos y alimentar las enemistades políticas, en un país envuelto en una campaña electoral previa a los comicios del 21 de abril del 2007, que marcarán el final de la presidencia de Olusegun Obasanjo, en el poder desde 1999. La oposición no ha tardado en responsabilizar al Gobierno del suceso por no dar solución al alto desempleo y aumento de la pobreza en el país que empuja a la población a actos desesperados. La explosión y el posterior incendio que se propagó rápidamente en un barrio de las afueras de Lagos, tuvo su origen, al parecer, en la rotura intencional de un conducto para extraer ilegalmente la gasolina. Extrema pobreza A pesar de ser el primer productor de crudo africano, dos terceras partes de los 130 millones de habitantes que tiene Nigeria viven por debajo del umbral de la pobreza.