La población viene soportando, entre otros problemas, los olores nauseabundos que emana la poza y que son arrastrados hacia la ciudad.

El alcalde, Gustavo Alcívar, precisó que se han visto obligados a declarar la emergencia porque necesitan actuar con soluciones inmediatas, ya que las poblaciones más cercanas a las lagunas amenazan con iniciar acciones.

 dato. La emergencia,  precisó Alcívar, les va a permitir en determinado momento hacer uso de los recursos que se tengan para dar solución al problema.

Al momento, el contratista Franklin Calderón ha reiniciado los trabajos de construcción de nuevas lagunas, pero los trabajos van muy lentos, dijo Alcívar, y las tres lagunas existentes ya colapsaron porque no recibieron oportunamente mantenimiento. “Están azolvadas y los malos olores contaminan el aire que respiramos, a esto se suma que los sectores más cercanos como Caña Dulce no deben seguir conviviendo con el problema sin que se haga algo”, acotó.

 piden intervención. De su parte, el vicealcalde, Samuel Cruz, indicó que con la declaratoria de emergencia en el cantón se aspira que los organismos competentes como ministerio de Salud y ministerio del Ambiente intervengan, lo mismo que el Comité de Operaciones Emergentes, COE provincial.

“Acá vamos a convocar al COE cantonal, y en este rato estamos buscando técnicos  porque una de las acciones inmediatas es la expropiación de por lo menos dos hectáreas hacia la parte posterior de las lagunas para tratar de aliviar la carga que tienen las tres lagunas existentes”, concretó el alcalde Gustavo Alcívar. <