“Herodes se enteró de que un niño había nacido y le dio miedo, porque pensó que le iba a quitar el poder”, explica el hermano Livio Cuenca, de los Hermanos Menores Capuchinos en Portoviejo. “Es que los Reyes Magos le habían dicho a Herodes que, según la profecía, el Mesías debía nacer en Belén de Judá. Luego, enterados por un ángel en sueños, se volvieron por otro camino”, recuerda el religioso. “A partir de ahí, hizo un decreto por el que mandó a matar a los niños menores de tres años”. “Este es el origen de la conmemoración de los Santos Inocentes, aunque luego vinieron las bromas, inclusive esto se ha ido comercializando”, y por ello hoy en día se hacen bromas en este día inclusive. En Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina, México, España y otros países de habla hispana es costumbre realizar bromas de toda índole. Inclusive hay medios de comunicación que tergiversan el contenido de alguna información a fin de que parezca real, una libertad que se dan trabajadores de prensa para dar rienda suelta a su humor en una oportunidad que tienen una vez al año. Y se avisa que se trata de una noticia falsa. También en ciertos países recomiendan no prestar ningún bien, sea objeto o dinero, pues el prestatario puede apropiarse de lo prestado. “Inocente palomita que te dejaste engañar, sabiendo que en este día nada se puede prestar”, se dice. Hay quienes dicen que, para darle un poco de alegría a un día en que sucedió algo tan terrible, es que derivó en una jornada donde se trata de arrancar algunas sonrisas. Más vale ser precavido en esta jornada, porque al recibir un chicle o un dulce sin motivo aparente, puede lograrse un insólito colorido en los dientes. Y no está de más recordar la antigua broma de colocar sal en el azucarero y viceversa.