Cientos de comerciantes ecuatorianos en los Estados Unidos, consideran que el nuevo sistema “E-Verify”, para obligar a los patrones a verificar el estatus migratorio de sus trabajadores, podrá llevar al país a la ruina, si ellos se ven obligados a cerrar sus pequeños negocios.  Como también, a las grandes empresas, que hoy emplean a millones de indocumentados.  

La genial idea de los republicanos que son mayoría en el Congreso estadounidense, para combatir la inmigración ilegal en el país, ha recibido el rechazo general, por el peligro que representa para la frágil economía de los Estados Unidos, que esta al borde de la quiebra.
 El sistema del “E-Verify”, obligaría a los patrones a pagar $150.00 dólares, al gobierno federal, para verificar –por la vía del Internet- el estatus legal de cada persona a la que ellos deseen emplear a tiempo completo o parcial.
 Entre los propietarios ecuatorianos, también existe la preocupación de que el “E-Verify”, los obligue a reportar su propio estatus migratorio, ya que un buen numero de criollos no son residentes legales. 
 Como una protección, ellos crearon mini empresas para camuflar su problema con inmigración, mientras juntaron a su familia, y llevan viviendo entre 5 y más de 20 años, como inmigrantes ilegales en los Estados Unidos.  Tiempo en el que ni siquiera han podido salir del país, para asistir a los funerales de sus padres o familiares en Ecuador.
Al igual que los comerciantes ecuatorianos, muchos otros en la comunidad latina viven en iguales condiciones en EE.UU. 
Pero, para los granjeros y las grandes corporaciones, que solo ofrecen el salario mínimo por hora, para recoger frutas y vegetales en el campo.  O, para atender a los clientes en los negocios de comida rápida, el “E-Verify” los dejaría sin los trabajadores con mano de obra barata, que tanto necesitan en la actualidad, ya que la mayoría de los clientes que les queda,  apenas ordenan los sándwiches y bebidas que ofrecen en el menú de $1 dólar, por no tener dinero para gastar más.
 Para los economistas y observadores financieros, los exagerados desacuerdos políticos entre los Republicanos y los Demócratas en el Congreso, en Washington, D.C., puede llevar al gobierno federal de los Estados Unidos, a la ruina total.  Sobretodo, si predomina el obvio discrimen racial de los blancos, e insisten en desacreditar al Presidente Barack Obama, por el color de su piel. 

 

Por: Theo Rodríguez