Un juego electrónico de espías que tiene como protagonista al jefe del gobierno ruso, Vladimir Putin, se difunde en las calles de Moscú a través de carteles en lugares concurridos, al estilo del agente británico James Bond.
El juego tiene por objetivo seleccionar los agentes "con más talento para la defensa y protección del Proyecto X". Los carteles muestran a Putin, con una pistola al estilo del famoso agente secreto, sobre todo en la película Casino Royale.