La falta de espacio en el cementerio central aún no tiene un proyecto para cambiar esta realidad. Jhonny Mendoza, director de Comunicación del cabildo, indicó que el municipio planifica ejecutar un nuevo cementerio público para cubrir la demanda de bóvedas.
En el cementerio central mientras tanto se ordena los sectores donde hay amontonamiento de cruces para que haya espacio para los peatones.
En el cementerio de Tarqui la realidad es diferente.
Hay 8 bóvedas disponibles y de acuerdo a los ingresos que se generen con la venta de esas, se va construyendo otras, destaca Alfredo Panchana, administrador.
Este cementerio está adjudicado a un grupo de personas particulares, quienes lo administran.
Panchana señaló que aspiran construir una cripta de varios pisos. El espacio es para 350 bóvedas.
El financiamiento se está gestionando.
Según Panchana la administración construyó una capilla, además dan gratuitamente sillas y en la zona donde se va a dar el entierro se coloca una tolda para que los deudos no sean afectados por el sol. <