La sentencia alcanza a un teniente y a siete soldados de un batallón del Ejército Nacional implicados en hechos registrados el 14 de marzo de 2006 en la zona rural de Yarumal, localidad en el departamento de Antioquia (noroeste).
La Fiscalía General precisó en un comunicado que las víctimas eran cuatro campesinos que los militares presentaron "como guerrilleros abatidos por tropas del Batallón Atanasio Girardot durante combates".
Sin embargo, la entidad resaltó que, con los testimonios y pruebas que los investigadores recogieron en lugar, "la fiscalía demostró más allá de toda duda razonable que las víctimas fueron sacadas por la fuerza de sus casas, que no hubo combates, y que eran campesinos que fueron baleados (disparados) por la espalda".
El oficial y los soldados fueron procesados por homicidio agravado, agregó la fuente, que indicó que los ocho serán confinados en prisiones que sean designadas por la autoridad carcelaria.
La condena es la más alta que se ha impuesto en Colombia a uniformados implicados en ejecuciones extrajudiciales, que en el país se conocen como "falsos positivos" (asesinato de civiles reportados como rebeldes para mostrar resultados y obtener beneficios, como días de descanso).
La fiscalía ha documentado más de 2.000 casos de esta práctica, con la que ha vinculado como acusados a 1.487 uniformados, casi un centenar de los cuales han sido sentenciados a penas de prisión.