La organización Amnistía Internacional (AI) indicó que la muerte de Pinochet supone una "llamada de atención" a los gobiernos, pues es necesaria una Justicia rápida para impedir que los culpables de las violaciones de los derechos humanos eviten ser procesados. Las víctimas de la dictadura de Pinochet y los abogados que lo llevaron a los tribunales en más de 300 querellas lamentaron que el ex dictador haya muerto sin ser condenado, aunque no ocultaron su alegría por la desaparición física del militar. Los partidarios y colaboradores de Pinochet consideraron su muerte como una pérdida "irreparable" para Chile y pidieron "tolerancia" a sus detractores y un funeral con honores para el ex dictador. "El dolor es muy grande, estamos consternados", dijo el general retirado Luis Cortés Villa, directivo de la "Fundación Augusto Pinochet" y una de las personas más cercanas a la familia del ex gobernante de facto (1973-1990). La ex primera ministra británica Margaret Thatcher también se mostró "profundamente entristecida" por la muerte del militar chileno, según informó hoy un portavoz de la "Dama de hierro", como fue conocida durante su gobierno. La actual ministra británica de Asuntos Exteriores, Margaret Beckett, destacó, por su parte, los progresos conseguidos por Chile en los últimos quince años tras el abandono del poder de Pinochet, fallecido hoy en un hospital de Santiago por un "fallo cardiaco" tras sufrir un edema pulmonar y un ataque al corazón hace una semana. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia, empero, declinó a reaccionar inmediatamente a la noticia de la muerte de Pinochet, dijo a Efe un portavoz de la diplomacia francesa. Isabel Allende, hija del presidente chileno Salvador Allende, derrocado por Pinochet el 11 de septiembre de 1973, dijo hoy que "ha muerto el dictador", y que le duele que, más allá del desprestigio de haber sido procesado o imputado, finalmente nunca concluyó ningún juicio contra él. La también diputada socialista, de visita privada en España, insistió en declaraciones a Efe en la necesidad de que sigan los juicios. Organismos de derechos humanos de Argentina lamentaron que el dictador chileno Augusto Pinochet haya muerto sin haber cumplido "la condena que merecía en una cárcel común por el genocidio que cometió". La secretaria de la Asociación Madres de Plaza de Mayo argentina, Beba Evel Petrini, afirmó hoy que "la muerte fue la salvaguarda" de Pinochet porque "lo salvó de haber pagado el horror que sembró". El vicepresidente venezolano, José Vicente Rangel, afirmó que la muerte de Pinochet "sella la impunidad" del ex dictador chileno. "Yo tengo respeto por la muerte y por los muertos, habrá otro momento para los juicios. Lo único que puedo decir es que la muerte sella la impunidad de Pinochet", declaró Rangel en un comunicado oficial. Gustavo Larrea, futuro ministro ecuatoriano del Interior, dijo en nombre del gobierno electo de su país que con la muerte de Pinochet se pone fin a un periodo que "ensombreció a América". El portavoz del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el Congreso de Diputados de España, Diego López Garrido, consideró "lamentable" que Pinochet haya muerto sin ser juzgado, pero recordó que fue España el país que permitió "dar un salto de gigante" para que los autores de crímenes contra la humanidad no quedaran "impunes". Diversas acusaciones particulares y populares en el caso contra Pinochet en España lamentaron que la muerte del ex dictador haya dejado impunes sus "crímenes" y no haya permitido a sus "víctimas" obtener la reparación por la que tantos años han estado luchando. La Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que lidera protestas en ese estado del sur de México, instó a los latinoamericanos a "seguir luchando por los derechos humanos y contra la represión", tras enterarse de la muerte de Pinochet. Con la muerte del ex general "no hay nada que lamentar", indicó el abogado Guillermo Paysse, coordinador del Servicio Paz y Justicia (SEPAJ) en Uruguay. "Pinochet fue uno de los tiranos más crueles de la región y, aunque sea poco cristiano, con su muerte no hay nada que lamentar", afirmó Paysee a Efe. Por su parte el escritor uruguayo Mario Benedetti dijo hoy que "la muerte le ganó a la justicia", tras conocer la noticia del fallecimiento del ex dictador. El Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), de familiares de unos 9.000 desaparecidos políticos en Guatemala durante el conflicto armado, lamentó que la muerte de Pinochet deje impunes los crímenes y desapariciones ocurridos durante su régimen. EFE