Los habitantes aseguran que los olores insoportables provienen de las descargas  que  salen  de la urbanización Villamaría.
"Cada vez que tienen  problemas  de  rebose en la tubería sanitaria que conduce sus aguas hasta la estación Miraflores, creemos que las aguas son desviadas al colector de aguas lluvias que contruyó la Epam para el barrio", dijo un vecino.
La tubería atraviesa la Urbanización, por lo que es imposible verificar el uso que realmente recibe, dijo Leonardo Santana, afectado con los malos olores.
La contaminación del ambiente tiene ya cinco días, sobre todo en las noches, donde seguramente se bombean las aguas negras a la tubería pluvial, denunciaron los vecinos.