Prefieren como regalo un balón de fútbol que una muñeca. Desde pequeñas las hermanas Vélez Puga se inclinaron por el llamado “Rey” de los deportes.
Hace 20 años Wilson Vélez Cevallos e Inés Puga viajaron a Alaska, Estados Unidos. Allá nacieron sus cuatro hijas.
Whitney, de 19 (delantera); Andrea, de 16 (volante); Sofía, de 13 (delantera), y Vanessa, de 12 años (volante), tienen cuerpo y rostro de modelos, pero ellas prefieren practicar fútbol.
“Antes de que nacieran quise que todas fueran varones, pero ahora estoy feliz por ellas”, dijo Wilson Vélez.
Todo comenzó cuando a Whitney después de practicar natación, básquet, gimnasia y atletismo, se dio cuenta que lo de ella era el fútbol.
Ella fue el ejemplo para que sus hermanas le siguieran sus pasos. Ahora su mayor ilusión es llegar a un equipo profesional.
Hace dos años se ganó una beca en la Universidad de Long Beach California.
Tienen doble nacionalidad, por lo que no hay ningún impedimento para que puedan representar al Ecuador. Cada dos años vienen a pasar vacaciones.
Cuenta su mamá Inés Puga que heredaron de su abuelo materno Wilson Puga y el paterno Antonio Cevallos Calero la pasión por el fútbol. <