Jaime Jaramilllo, director provincial de Salud aceptó  que existe un aumento de personas con síntomas de enfermedad tipo influenza y esto tiene que ver con el cambio de clima.

A esto se suma que hay diez casos, sospechosos, de pacientes con AH1N1 y para estar seguros y confirmar se han enviado las muestras al Instituto Nacional de Muestras de la ciudad de Quito. La vacuna es una manera de prevenir que la gripe se desarrolle a mayor grado. Por ello, Jaramillo explicó que se está haciendo vacunaciones contra la influenza estacional a los mayores de 65 años de edad.
Mientras que a finales de este mes e inicios de febrero se empezará a vacunar a los menores de 5 años de edad. Además, estas vacunas ayudan a proteger para la influenza AH1N1  y se inyectará en los Centro de Salud y en las Brigadas Móviles.
En el hospital Gustavo Domínguez se está atendiendo a 120 pacientes diarios con síntomas de gripe.
En todas las farmacias de la ciudad y del país no se pueden vender antigripales sin tener una prescripción médica previa.
Amparo Rubio, propietaria, de Farmacias “Comunitarias”, explicó que desde que se volvió a especular los casos de la influenza AH1N1 no se ha vendido medicamentos sin recetas, al menos no en su farmacia.  Uno de los medicamentos que más han recetado los médicos ha sido Ibuprofeno, que no cambia el cuadro clínico del afectado de gripe, sostuvo Rubio.
Por otra parte, Luis Calsaguano, médico y jefe de emergencias del hospital “Gustavo Domínguez”, señaló que la enfermedad de la gripe se ha incrementado debido a la estación invernal, pero que no es una epidemia.  Con el aumento del virus, el hospital se ha congestionado más de lo normal.