A pesar de que su nombre se anunció desde hace más de 15 días y la dirigencia lo negó, el lunes, en la presentación del Manta, llegó y ahora es la esperanza de gol en el equipo “celeste”.
Ramírez, al igual que Maximi-liano Becvaqua, quien en el 2010 fue el tercer goleador del campeonato nacional, llega sin tanta promoción.
Asegura que dentro de la cancha es un jugador rápido y contundente; además tiene la experiencia de haber jugado 12 partidos de Copa Libertadores, en el 2006, con Lanús, año en que debutó en el fútbol profesional.
En el 2008, con Lanús, volvió a jugar Libertadores.
Con un metro 73 de altura, y nacido el 18 de febrero de 1988, “El Toro”, como lo llaman en Argentina, estuvo  un año en el Chacaritas Jr., en el 2009, y luego volvió a Lanús, en el 2010.
No obstante, tuvo poca continuidad, e incluso este año no estuvo en los planes del técnico Gabriel Schürrer, por lo que aceptó venir al Manta.
Antes de aceptar este reto conversó con su amigo, el también argentino Cristian Menéndez, jugador de Emelec, quien fue su compañero en el Lanús, y le dijo que se viniera, que es un torneo muy competitivo, con muchas oportunidades.
Sobre “Facebook” Menéndez, indicó que es uno de sus mejores amigos, y aunque no ha tenido la oportunidad de saludarlo, espera hacerlo en cualquier momento.
Asimismo, añadió que tiene dos hijas y que es más probable que su familia también se venga al Ecuador.
El Manta ayer continuó la pretemporada, pero esta vez trabajaron en la mañana en la playa El Murciélago, donde hicieron  práctica física junto al preparador Fabián Cancelarich; luego, en la tarde, volvieron a los entrenamientos en cancha en el complejo San Juan.  <