Siete personas acusadas de narcotráfico fueron ahorcadas en el patio de una cárcel de la provincia iraní de Kermanshah, en el suroeste del país, con lo que son ya 15 las ejecuciones llevadas a cabo en Irán en los últimos tres días.
Los siete ejecutados "preparaban y distribuían desde cinco kilogramos de heroína hasta cien kilogramos de crack sintético", según el fiscal general de la citada provincia, Mojtaba Maleki. De acuerdo la ley iraní, la obtención y distribución de más de 30 gramos de heroína esta penada con la muerte.
"Algunas de estas personas tenían antecedentes de transporte y distribución de drogas y hasta la fecha habían disfrutado varias veces de la compasión islámica. El combate contra el narcotráfico continuará sin fisuras y con firmeza", dijo Maleki. <