Hasta los familiares de este personal marcharon, como es el caso de María Zambrano y sus primas Karen y Tatiana, quienes acompañaban a un pariente dueño de una unidad. Aseveran que hacía mucho tiempo que no tenían una Navidad tan triste, primero por la magnitud del accidente del 24 de diciembre y segundo por la caótica situación económica que tienen.
“No hemos podido celebrar nada. Pasamos momentos complicados y se vienen una serie de deudas”, señaló Ramiro Macías, controlador de una de las unidades.
Los directivos de Reina están distribuidos entre Quito y Guayaquil, pugnando para que les quiten cuanto antes la suspensión.

 SOAT. Iván Gómez, representa al Fonsat en Manabí y está desde ayer en Chone para receptar la documentación que permita a los deudos acceder al Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT). Llegaron a esta ciudad, ya que la información que necesitan la posee el fiscal Gabriel Solórzano, afincado en esta ciudad y que hizo el levantamiento de los cadáveres con la Policía de El Carmen.
Antes, los funcionarios habían llegado a San Isidro, donde hubo 22 víctimas, indicaron, pero no encontraron en esa parroquia de Sucre la documentación que a la postre la tiene el fiscal. Regresarán a esa localidad el lunes, para instalar una oficina y empezar a tramitar y pagar las indemnizaciones.
“Cumplimos una disposición de la Presidencia de la República. Estamos seguros que hasta el 15 de enero del 2011 ya se habrá pagado”, dijo Gómez, quien aseveró que certifican documentos como el protocolo de la autopsia y el parte policial certificado por la Policía, como únicos requisitos para el pago del seguro.
El siguiente paso, aseguró, es notarizar el protocolo y el parte para hacer la posesión efectiva del beneficiario. Los familiares reciben 5 mil dólares por muerte y 400 dólares por gastos funerarios, previo presentación de factura. En los heridos, el pago depende de cada caso y llega hasta los 2.500 dólares.

 identidad. Luis Edilberto Chávez Vergara, de 33 años y chofer del bus 57 de Reina del Camino que murió en el accidente de éste en La Crespa, tenía una cédula con otra identidad, la de Nery Santiago Chávez Figueroa, un taxista guayaquileño de 45 años de edad.
Asimismo, con esa identidad poseía una licencia de conducir tipo E, emitida por la Comisión de Tránsito del Guayas. Aunque Chávez circulaba con la licencia de Darwin Jacinto Meza Saldarriaga, con la cual salió desde Quito el 23 de diciembre por la noche y registrado en la terminal terrestre; sin embargo, en la hoja de ruta de la Policía consta como Luis Chávez.
El fiscal Solórzano evitó ahondar detalles. Sobre esta supuesta suplantación de identidad, dijo que se sabrá sobre la marcha. “Hay que ver dónde se dio ese presunto delito”, acotó. <