Se trata de una zona montañosa e irregular, con muchas lomas o pendientes que la hacen asemejar a una cordillera, gran parte del año la zona pasa cubierta de neblina y por lo tanto húmeda, muestra de lo cual se observa a los árboles cubiertos de musgos. Para cruzar ese tramo de la vía se debe transitar 3,7 kilómetros, con peñas arborizadas por un costado y abismos por el otro, con vertientes de agua que en muchas ocasiones han originado deslaves, especialmente en la temporada invernal.

Este medio quiso consultar a los primeros habitantes de lo que hoy es el poblado La Crespa sobre el origen de su nombre y al llegar al lugar nos encontramos con la maestra Lesbia Araceli Acosta Zambrano, quien aseguró que ese nombre surgió de la broma que un día se hicieron los extintos Carlos Alberto Aray y Armando Acuria Mazamba. Según la maestra, cuando aún no existía el carretero, los dos citados hombres terminaban de subir la pendiente con un costal de arroz sobre hombros cada uno; en ese momento uno de ellos exclamó “ha sido duro subir esta loma”, a lo que el otro respondió en son de broma “es más duro que trepar una crespa”, por no decir “cresta” en alusión a una mujer. Luego llegó la carretera y prácticamente el nombre La Crespa se institucionalizó. Pero Monserrate Vargas, la segunda mujer que tuvo Armando Acuria, sostiene la versión que en una ocasión que llegaron unos señores desde Santo Domingo con la finalidad de ver que nombre ponían al lugar, su extinto marido les propuso La Crespa, por las montañas que lo circundan y El Consuelo, por lo fresco del ambiente; determinando ponerle el primero de los nombres.

Los primeros pobladores de La Crespa recuerdan que los primeros vehículos que servían de transportes eran simples camionetas, hasta que después surgieron las cooperativas Reina del Camino, Flavio Alfaro y Carlos Aray.

Con el desarrollo de los pueblos surgió la delincuencia y por mucho tiempo fue La Crespa el lugar ideal para que las bandas de asaltantes intercepten a los transportes; la reconstrucción de la vía dificultó la situación a los malhechores porque ahora los vehículos transitan a mejor velocidad que antes, pero eso ha originado también una serie de accidentes de tránsito que han dejado dolor y muertes en muchas familias manabitas.

En agosto del 2006 una unidad de transportes Fenix chocó con una maquina de la constructora que hacía la carretera en el sector La Crespa y 10 pasajeros resultaron heridos. El 1 de octubre del 2007 un camión que transportaba ganado desde Chone a Santo Domingo cayó al abismo y causó la muerte de José Pedro Moreira Rodríguez y Pedro Carlos Delgado y heridas al hijo del último de los nombrados. A inicios de abril del 2009 un tanquero con combustible que bajaba la pendiente se volcó al costado derecho y murió el acompañante del chofer, Héctor Luís Moreira Moreira (20).