En el área de cuidados intensivos del Seguro Social una mujer lloraba porque su esposo sufrió un paro cardíaco.
De pronto, entraron dos médicos y cerraron la puerta. Allí estuvieron alrededor de 10 minutos, y luego uno de ellos mencionó que quién era el familiar del paciente.
La mujer se acercó. Sin rodeos el médico dijo: "El enfermo se va a morir y no se puede hacer mucho".
La mujer quiso preguntar algo, pero el doctor señaló que no quería más preguntas y se fue.
La señora rompió en llanto.
Así, sin saber llegar a la susceptibilidad de los familiares, se manifiestan algunos médicos de los hospitales públicos.
Liliana Arcentales, quien tuvo un familiar en cuidados intensivos en el hospital Rafael Rodríguez Zambrano, mencionó que hay varios doctores que son desagradables cuando se les pide información sobre el paciente.
"No quieren hablar, o simplemente puntualizan que el estado es grave y nada más", manifestó.
Agustín Mero es otro caso. Él tiene un familiar en el área de cirugía. Él manifiesta que allí los médicos tratantes sólo llegan una vez al día, pasan visita a los enfermos y se van.
La mayoría no da ninguna información a los familiares.
Lo mismo ocurre en las salas de quemados, pediatría y ginecología.
En Quito y Guayaquil este mes los médicos son capacitados para que aprendan cómo dar malas noticias. En Manta, en cambio, estas enseñanzas no se han implementado. <
Capacitación. Violeta Ávila, directora del hospital Rodríguez Zambrano, indicó que los doctores han estado en varias conferencias de relaciones humanas para tratar este tema.
Expresó que pueden estar actuando de manera déspota, alguno, pero cuando pase esto el familiar debe denunciar el caso.
En el hospital del Seguro, tres médicos recibieron bajas calificaciones en su evaluación por no saber tratar a los pacientes.
Según Gonzalo Rodríguez, director, el usuario puede denunciar el mal servicio a su despacho. <